Nostalgia Cochina, nadie te invitó!!

Debo reconocer, por más que no quiera, que estos últimos días la nostalgia me corroe. Yo he tratado con todas mis fuerzas de echarla de mi cabecita y mi corazoncillo, pero ahí está la muy pelotuda.
Qué se imagina esta loca, ah? Me carcome mis buenos momentos, no me deja disfrutar, ni estudiar ni pensar y me perjudica como nunca.
Yo intento con todas mis fuerzas no pensar, evadir lo que siento, pero no resulta. O al menos no logro falsear como antes. La Rosita super aventurera y la Tote maxivaliente se fueron para la casa. Y dejaron acá en medio de Asia a la pobre Rosario, la gallina sin plumas.
Me siento lejos, más lejos que nunca.
No quiero que malinterpreten mis palabras. Acá lo paso muy bien, mis amigas me quieren, me acogen y me regalonean, pero eso no me alivia. Es que aunque lo que me dan es más de lo que esperé, los extraño. Extraño a mi familia, la mejor de todas. Extraño a las locas de la mente, las más chifladas y lindas del universo. Extraño a las chiquillas. Extraño mi casa, mi cama y mi rutina.
Extraño a la que era hace unas semanas. Extraño mi valor, mi arrojo y mi felicidad ante la independencia.

Y es extraño verme así. No me entiendo.